LA ESTERILIDAD

Es definida como la incapacidad de procrear. Puede por lo tanto afectar tanto al macho como a la hembra y puede tener causas muy diversas.

La esterilidad del macho es la más fácil de detectar porque los exámenes que se le realizan para estudiarla son muy sencillos. Primero se analiza el líquido seminal y esto permite medir la concentración de los espermatozoides, comprobar su movilidad y alguna vez evaluar el porcentaje de espermatozoides anormales.

Cualquier anomalía en uno o varios de esos caracteres pueden perturbar la fecundación.

En la hembra es más difícil porque solo es fértil durante el celo y más precisamente en el momento del periodo de ovulación, que normalmente se sitúa entre el octavo y el quinceavo día del ciclo sexual. Por lo tanto, lo mas aconsejable es hacerla cubrir en repetidas ocasiones durante esa fase. Si estamos seguros de la fertilidad del macho, lo más probable será que la perra quede fecundada, si no ocurre así, habrá que plantearse la existencia de alguna anomalía en ella. El origen de la esterilidad puede ser una perturbación del ciclo sexual, un obstáculo meramente mecánico o una hiperplasia del útero.

La manifestación de una perturbación del ciclo sexual puede ser muy diversas puesto que la anomalía puede traducirse por la ausencia de ciclo por un acortamiento o un alargamiento del intervalo entre dos ciclos.

En principio, la hembra tiene el primer celo a partir del séptimo mes, pero no vamos a considerar que está en la madurez sexual hasta la edad de dos años. En general, suele haber dos ciclos por año, lo que no quiere en absoluto decir que sean anormales los ciclos que se produzcan cada cuatro o nueve meses, pues también el tamaño de la hembra influye. Lo que nos importa en primer lugar es comprobar la regularidad o irregularidad de esos intervalos, y en este sentido es útil, muy útil anotar las fechas del celo en la cartilla sanitaria del animal.

Los periodos del celo duran generalmente unos 21 días y su alargamiento se debe a menudo a un quiste ovárico.

Si los ciclos son normales y la duración del celo es constante, el periodo favorable para cubrir a la perra se sitúa como ya os he dicho entre el octavo y el quinceavo día. Algunas perras se niegan por completo al apareamiento tanto por razones psicológicas como por razones físicas que generalmente suelen consistir en una malformación del aparato genial que le impide al macho cubrirla y a la hembra le produce dolor.

Debido a la dificultad que supone descubrir la causa de la esterilidad no resulta fácil determinar el tratamiento a seguir. Las terapias hormonales se justifican cuando se haya evidenciado la existencia de una disfunción glandular, pero si se ha detectado que el origen de la esterilidad es un agente infeccioso habrá que recurrir a los antibióticos.

La cirugía se hace indispensable para tratar un quiste o un tumor del ovario, o una anomalía de constitución de las vías genitales.

Hay que tener en cuenta que aunque la esterilidad puede ser causada por numerosas afecciones infecciosas, no se debe descuidar el efecto de ciertas carencias de vitaminas que pueden no tener más incidencia que ésa en la salud de nuestro animal.